viernes, 17 de diciembre de 2010

Compañeros de AGR (CLARÍN) continúan huelga de hambre

07:19 | Viernes 17 de Diciembre de 2010

Empleados de imprenta de Clarín continúan huelga de hambre

Tiempo Argentino. Por Fernando Pittaro Con apoyo de la CGT, el Movimiento Evita y otras organizaciones sociales hoy se realiza un acto frente a la planta de Artes Gráficas Rioplatenses.

Tiempo Argentino
Los delegados del Grupo Clarín, que exigen el cumplimiento de una orden judicial que ordena su reincorporación, cumplen hoy el quinto día de huelga de hambre y siguen encadenados a la puerta de la planta Artes Gráficas Rioplatenses (AGR), donde se imprimen las revistas Viva y Genios, entre otras. En ese marco, la empresa dio asueto para impedir la elección de la comisión interna que debía realizarse hoy.
En las últimas horas, los trabajadores despedidos que pasan día y noche en el lugar, denunciaron que patovicas contratados por la empresa ingresaron a la planta para intimidar a los delegados que se encontraban trabajando. Además, personal policial de civil custodia la zona a modo de prevención.
Nicolás Rivero, uno de los empleados despedidos que está encadenado al portón principal, afirmó en diálogo con Tiempo Argentino: “Sabemos que ponemos en riesgo la vida con la huelga de hambre, pero nosotros decidimos poner el cuerpo en esta lucha. Acá nos vamos a quedar hasta que la empresa cumpla la orden de la justicia de reincorporarnos. Además, describió el panorama sombrío que se vive dentro de la fábrica: “Todo el que participa de una asamblea es marcado y tildado de ‘quilombero’. El maltrato y la persecución de la empresa es permanente, por eso son reiterados los tratamientos psicológicos y psiquiátricos de los compañeros. Yo tuve tres intentos de suicidio”, denunció Rivero.
Luis Siri es otro de los delegados que realiza la medida de fuerza en la fábrica ubicada en las calles Del Barco Centenera y Perito Moreno. “Es inadmisible que una empresa que factura 400 millones de pesos anuales se niegue a acatar la orden de la justicia. Clarín tiene que entender que ya no es el mismo que en la década del noventa, donde podía hacer lo que quería”, dijo.
El conflicto se inició en septiembre de 2004 cuando 119 trabajadores, entre ellos la totalidad de los delegados del taller, fueron despedidos de la planta ubicada en Nueva Pompeya, donde se imprime, entre otras publicaciones, la guía telefónica y toda la folletería que llega a los principales supermercados del país. El Grupo Clarín judicializó el conflicto y hace seis años que desconoce dos fallos de la justicia que ordena la reincorporación de los trabajadores.

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